Siempre fui un amante del deporte. Desde muy chico me ha gustado ver todo tipo de deportes, disfrutar de deportes de nieve o de la bicicleta y competir en varios deportes como tenis, fútbol sala, fútbol siete, pádel o rugby. Varios años, incluso, teniendo que organizarme bien para poder compaginar estudios con entrenamientos y encuentros de los diferentes equipos en los que estaba integrado. Tengo 25 años y soy lo que se dice un “fatiga” del deporte.
Todo esto tenía pinta de que iba a pasar factura y en febrero de 2013, cuando tenía 20 años, sufrí una rotura total de LCA y rotura parcial de menisco externo en mi rodilla izquierda jugando una pachanga de fútbol sala con mis amigos. Durante todos los años anteriores había tenido alguna lesión, pero nada serio. Puse mi rodilla en manos de Rafael Muela Velasco, un excelente traumatólogo de Sevilla que intervino mi rodilla con gran éxito.
El post operatorio fue como mínimo incómodo. Durante 2 o 3 semanas, estuve tomando unas 10 pastillas diarias entre antinflamatorios, analgésicos y demás, por supuesto haciendo los ejercicios que me mandó Rafael. Hice veinte sesiones de rehabilitación en un mes, empezando las sesiones a las 2 semanas de la intervención. Al final de las veinte sesiones, pude dejar las muletas y poco a poco fui recuperando la seguridad. Seguí recuperando y finalmente pude volver al deporte de manera normal a los 5 meses aproximadamente, por supuesto, de manera progresiva.
Mi rodilla derecha, tuvo el pasado mes de marzo la misma mala suerte que la izquierda. Diferente rodilla, mismo diagnóstico. Puse de nuevo mi rodilla en manos de Rafael, con un pequeño detalle. Antes de la intervención de ofreció, y recomendó encarecidamente, el uso de GAME READY para una mejor recuperación. Lógicamente, confíe en su criterio y una vez terminó la intervención, en el momento en el que estuve en la sala del despertar, todavía muy sedado, me pusieron la máquina GAME READY en la rodilla.
Cuando empecé a espabilar, notaba un fresquito bastante confortable para el estado de mi rodilla. En primer lugar, me llevé una grata sorpresa cuando me di cuenta de que no fue necesario el uso del sistema de drenaje para mi rodilla. Dicho sistema es algo realmente desagradable en el postoperatorio. Estuve usando GAME READY durante dos semanas.
El uso de GAME READY es realmente simple y los resultados increíbles. Apenas tuve que tomar pastillas para el dolor o inflamación, no eran necesarias porque apenas había dolor, inflamación ni hematomas. Dicen que el frío es el mejor antiinflamatorio. Hice igualmente los mismos ejercicios que me mandó Rafael, pero con diferentes resultados. A los 10 días me sobraban las muletas. ¡Aún no había empezado la rehabilitación en el fisio y ya me sobraban las muletas!
Durante esos 10 días usé GAME READY casi 24 horas al día, dormir con la máquina funcionando evita tener que tomar algún calmante para poder conciliar el sueño esos primeros días. Los días de cama-sofá y sofá-cama, son mucho más llevaderos al no tener dolor ni inflamación. En la rehabilitación, los ejercicios de recuperación se pueden hacer de manera más efectiva y mucho menos dolorosa.
Realmente, he podido comparar dos situaciones completamente idénticas y puedo decir que GAME READY es totalmente recomendable. Marca una diferencia abismal. Ahora hace dos meses y medio que me intervinieron y puedo decir que apenas me acuerdo de que tenía roto el LCA. Volveré a hacer deporte en poco tiempo.